Mas reflexiones y mis reflexiones

14.06.2023

¿Cómo es la línea que separa el trabajo del placer?

La vida del adulto es complicada, nadie te lo dice cuando eres pequeño y si alguien te lo ha dicho, por algún mecanismo extraño que tenemos en la cabeza pensamos "yo puedo hacerlo mejor". Es posible que los padres y las madres también tuvieron ese pensamiento y saben que no se puede cambiar. Es quizá por eso que nos miran con ternura frente a una afirmación así.

Yo fui un tiempo trabajador por cuenta ajena luego decidí hacerme autónomo. Trabajando por cuenta ajena tienes que lidiar con jefes mediocres en todos los sentidos y compañeros aún más mediocres dispuestos a matar o a morir por una mirada de ese jefe mediocre.

Trabajar por como autónomo sabía que sería difícil, pero lo abordé. Tengo que decir que desde entonces duermo mejor, mis relaciones sociales son más sanas y disfruto más de la vida.

Opté por un trabajo en el que no puedo firmar mis trabajos. Os lo explico. Estoy en un equipo donde recibimos unas instrucciones y nos ponemos en marcha a pensar y a escribir. Si me permitis que sea honesto, ese trabajo me gusta, el ambiente de trabajo es bueno y también lo es el dinero. Sin embargo, tengo la espinita que mis palabras, mis ideas y mis propuestas -que dicho sea de paso, son buenas- se esconden detrás de otra firma que por contrato no puedo desvelar. Supongo que ese bienestar me viene cuando, posiblemente de forma inconsciente comparo con mi vida anterior.

En algún momento me surge la oportunidad de trabajar con una galería de arte en Madrid, una ciudad a la que amo y que está a unos 2.000 km de mi casa. Mi primera idea fue, ¿cómo lo haré? Quien me ofreció este segundo trabajo creía tanto en mí que todo fue muy fácil. Y así es, muy fácil, realmente hay muchos trabajos que se pueden resolver de forma telemática.

En realidad, hago en mis dos trabajos prácticamente lo mismo, o muy parecido. En ambos tengo reconocimiento del trabajo bien hecho, y dicho sea de paso también estoy contento. Hay sutiles diferencias entre ambos que son muy importantes. De uno puedo vivir económicamente, del otro no. Pero en ese otro yo tengo algunas satisfacciones personales que no me da el primero y para ser honesto no podría vivir solo con la ventaja económica.

Este otro trabajo me llena, me da perspectivas y la posibilidad de decidir y también de leer mi nombre al final de mi trabajo, de firmar lo que hago. Hay otra diferencia, el beneficio económico me ata pero el bienestar me estabiliza.

El bienestar viene también porque trabajo con artistas que son personas maravillosas y honestas, son auténticas artistas. De vez en cuando cuando estoy en Madrid tengo la oportunidad de ver sus obras en vivo, de tocarlas y creedme me lleno de orgullo por ellas y por tener la inmensa suerte de tenerlas como compañeras y de poder pensar sobre sus obras.

El mercado del arte no es fácil en ningún sitio. Sin embargo, en cualquier ámbito un equipo fuerte y profesional favorece encontrar oportunidades y tener éxito. Una retroalimentación que no para y que es nuestro motor.

Por cierto, no os perdáis el blog Ojo Avizor sobre coleccionismo en nuestra web de la galería, aquí. El blog os ayudará a que os estructuréis la forma de pensar y de educar la mirada. Esto es especialmente importante si la inseguridad os bloquea a la hora de buscar o de comprar obras de arte. También si os gustaría empezar una colección de arte, pero sentís que os falta algo.

En cualquier caso hay una cosa buena que tiene el coleccionismo de arte es que se puede ser un joven coleccionista a cualquier edad.

Leo Casas Vicente